La idea de la pieza es crear un museo interactivo habitado en el que a
través de un recorrido perceptivo por: Rastros, huellas y restos
arqueológicos encontrados en un hipotético futuro, conoceremos la
era del antropoceno y los acontecimientos que precipitaron el fin de
la humanidad. En este museo tendremos “consciencia” de lo que
significó ser humano a través de la experiencia humana corporal de
cada uno de los visitantes. Ronem Ram (mar menor al revés) será el
nombre de la inteligencia artificial a modo de consciencia, que nos
guiará a través de este recorrido. Su voz será el elemento
narrativo de la pieza. La idea que me ronda la cabeza es poder
alejarnos de nosotros mismos para observar la especie humana desde
otro lugar. La pieza se hace preguntas en torno al concepto de
“vida” y cómo éste puede cambiar en un futuro cercano. También
ahonda en lo que nos distingue y define con respecto al resto de las
especies. El conflicto de la obra ocurrirá en cada espectador, a
través de la visita a un mundo extraño que en realidad es el suyo
propio. Pienso en el futuro espectáculo como una pieza teatral de
ciencia y ficción especulativa. Mi modo de trabajar en residencia es
a través de imágenes e intuiciones que voy desarrollando. En mis
piezas, todos los recursos que componen el hecho teatral: Dramaturgia,
cuerpo, luz, sonido y plástica se crean a la vez. Esta curiosa manera
de crear, hace que la dramaturgia se vaya construyendo a través de
imágenes y percepciones que luego quedarán impresas en la pieza
final. En este proceso, para mí es importante “testar” los juegos
perceptivos con los espectadores, a través de muestras abiertas que
se realizan en cada residencia de creación. Lo que los espectadores
escriben al final de su experiencia son los indicadores para saber si
la pieza está funcionando como queremos. Disfruta de los mejores
espectáculos en el Espacio Inestable.
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21/09/2019 Last update